sábado, 21 de diciembre de 2013

Jodra del Pinar: iglesia de San Juan Bautista Degollado


Dentro del núcleo de pequeñas poblaciones que se localiza alrededor de la monumental villa de Sigüenza, se encuentra Jodra del Pinar, en cuya parte más alta, como venía siendo costumbre en épocas, se levanta la iglesia románica de San Juan Bautista Degollado, advocación que recuerda a aquélla otra, de similares características, que se encuentra en la vecina provincia de Soria, y se refiere al templo parroquial de su despoblado de Arganza. De esta iglesia, se podría afirmar, que se trata de una construcción que, si bien pequeña en conjunto y en comparación con otras imponentes construcciones de su estilo, tanto de la zona como fuera de ella, resulta, no obstante, esbelta y bien proporcionada. Llaman la atención, en primer lugar, la pequeña plataforma escalonada que, simulando los escalones del Templo de Salomón, introducen al visitante a la galería de cinco arcos, contando con el principal, y por defecto, al pórtico de entrada al templo.

 
Tiene, así mismo, una puerta abierta en el lado oeste, que permite también el acceso a la galería. Los arcos de ésta, se sustentan sobre columnas, cuyos capiteles, de sobria cuando no cisterciense belleza, muestran motivos foliáceos, que recuerdan ese concepto de paradysum o paraíso referido a los jardines y la importancia que éstos tenían, simbólicamente hablando, para las diferentes culturas del Medievo, continuadoras, a grosso modo, de tradiciones muy anteriores. Se estima que el templo, que perteneció al Común de Villa y Tierra de Medinaceli, se levantó en los siglos XII-XIII, con gentes procedentes del norte, durante las repoblaciones llevadas a cabo a medida que se iban reconquistando los territorios a los árabes.